La tradición española en la producción de documentales de naturaleza surge en los años 70 con el carismático divulgador medioambiental Félix Rodríguez de la Fuente, quién sobre todo a través de la serie de TVE El hombre y la tierra (124 capítulos) popularizó el mundo de la naturaleza con producciones aclamadas tanto en España como en el exterior.

Fallecido en marzo de 1980 en un accidente aéreo en Alaska, Rodríguez de la Fuente dejó una huella imborrable y todos los naturalistas españoles que llegaron después reconocen la importancia de su legado.

Tras la desaparición del pionero, el naturalista y divulgador ambiental Joaquín Araújo completó ocho capítulos de El hombre y la tierra. Ya en 1986, creó la serie Silencio roto, que fue vista por más de 11 millones de espectadores en España y vendida a una veintena de países. Araújo fue también guionista y presentador de la serie documental de TVE El arca de Noé.

Desde finales de los años 80, Joaquín Gutiérrez Acha, naturalista y cineasta madrileño, comienza a llamar la atención de productores internacionales, atraídos por su capacidad para asimilar nuevas técnicas y su original lenguaje visual.

Así, National Geographic decide encargarle la dirección de la que fue la primera incursión de esta compañía en España, El latido del bosque, documental sobre el parque natural de Los Alcornocales, con coproducción de Canal Plus, que lo estrenó en 1997.  

Más recientemente, Gutiérrez Acha ha dirigido, con producción de Wanda Films, la trilogía sobre el patrimonio natural español formada por las películas documentales Guadalquivir (2013), Cantábrico (2017) y Dehesa (2020).

El compromiso y ambición de la productora-distribuidora independiente Wanda, liderada por los hermanos José María y Miguel Morales, ha resultado clave para el desarrollo del cine documental en España, aliándose a menudo con socios internacionales para sacar adelante sus proyectos, como hizo con Ukbar Filmes de Portugal y la austriaca Terra Mater Factual Studios en el caso de Dehesa.

Por su parte, el cineasta Gerardo Olivares, hoy jefe de documentales en la productora Mediacrest, ha realizado numerosas producciones relacionados con la naturaleza, entre ellas Marcos, el lobo solitario (2012), producción de Wanda, sobre la vida de Marcos Rodríguez Pantoja, que había inspirado la película de ficción Entrelobos.  

Con más de 25 años de trayectoria, el naturalista Álvaro Mendoza lleva producidos más de 100 documentales y más de 300 programas de televisión para National Geographic, Disney, Discovery, Netflix, France TV, ZDF
y TVE. Entre sus títulos, Hot Life Africa, serie 4k de 5×52 que ha dirigido y producido desde la compañía Genera Docs.

La senda de Félix ha sido seguida también por el biólogo Arturo Menor Campillo, considerado uno de los mejores especialistas en documentales
sobre naturaleza, que estrenó en 2014 WildMed. El último bosque mediterráneo, un éxito internacional completado en 2018 por Barbacana, la huella del lobo, producido desde su compañía Acajú Comunicación Ambiental en colaboración con Canal Sur y CMMedia.